Entender y gestionar nuestras vidas depende de cuanto nos conocemos.
¿Qué es conocerme a mí mismo y para qué sirve?
El autoconocimiento, ocupa un lugar especial en la psicología; y depende de nosotros, hacer de nuestras vidas más significativas y especiales. Es parte fundamental de nuestra autoestima, nos ayuda a saber de uno mismo y de nuestras relaciones con los demás.
Conocerse a uno mismo es un tema que preocupa en el desarrollo personal y la psicología; es tomado como objeto para responder las más complejas de las preguntas: ¿por qué somos lo que somos? y ¿por qué hacemos lo que hacemos?
Entender ¿cómo somos? es conocer ¿quiénes somos?. A menudo, decimos que no queremos conocer la verdad sobre nosotros mismos porque podría doler pero ¿y si no es así?, que pasa si la verdad realmente nos ayuda.
¿Cuándo comienza el autoconocimiento?
Desde que existe la consciencia existe el autoconocimiento, que no es otra cosa que, tener conciencia de lo que somos. Cuanto más aprendamos de nosotros mismos más nos descubrimos.
Saber sobre tí, es una manera de comprender los verdaderos motivos de uno. Esto no significa que conoces la razón detrás de tus acciones, significa que conoces la razón de tus acciones.
Si quieres ser una mejor persona, entonces, necesitas entender por qué haces lo que haces. Una persona que se entiende a sí misma puede ver las consecuencias de sus actos.
Tipos de Autoconocimiento y ejemplos
Descubrir, como te sientes contigo mismo y como afecta tu funcionamiento social en el día a día, es comprender, como uno ve la responsabilidad del sistema social al que pertenece y su papel en él. Tipos de autoconocimiento y ejemplos:
Activo: Ser yo mismo/a con otras personas pero tener cuidado, de no ser, demasiado abierto o revelador sobre mis verdaderos pensamientos y sentimientos (ejemplo).
Almacenado: Sé que tengo la capacidad de mantener la calma bajo presión (ejemplo).
Semántico: Definirme a mí mismo/a en las redes sociales que digan cosas sobre nosotros: soy una chico/a amable, trabajador, generoso e impaciente (ejemplo) .
Episódico: Sé que soy capaz de grandes cosas. Sé que soy capaz de tomar decisiones que afectarán mi futuro. Sé que soy capaz de defender lo que creo (ejemplo).
Real: Soy una persona altamente motivada que siempre, está buscando nuevas oportunidades para aprender y crecer. Prospero en entornos donde puedo desafiarme constantemente y crecer como persona (ejemplo) .
Potencial: Me gustaría ser ordenado (ejemplo).
Comparando el autoconocimiento real y el potencial en ambos casos puedo llegar a lo que me gustaría ser. Del mismo modo, un ejemplo desde otra perspectiva sería: El “Yo ideal” aspiración personal del “Yo obligación” para conseguir algo .
Global: Soy una persona que le gusta ayudar a los demás (ejemplo). Esto sería una creencia generalizada sobre mí mismo .
Específico: Soy una persona introvertida al que le encanta pasar tiempo a solas. También, soy un ávido lector y puedo ser muy analítico y crítico (ejemplo).
Debes llegar a comprender que eres único con tus propios carismas.
¿Cómo comprender y reconocer quién soy?
Conocerse a uno mismo es acceder a la sabiduría. Es un proceso con el objetivo principal de aprender a vivir y disfrutar la vida. Esta comprensión no llega de inmediato, sino, a través de las dificultades a lo largo del camino en la vida con las experiencias.
Además, cuando una persona recorre este proceso, inevitablemente sucederá y encontrará soluciones creativas a los problemas; que ya no se limita a los grandes artistas o inventores, también necesario para los trabajadores del conocimiento en todas las industrias de TI.
El comprenderse puede llegar, con un destello de luz a través de reflexiones de experiencias vividas o mediante una investigación cuidadosa, con la habilidad de hacer preguntas. Puede suceder instantáneamente o no.
Objetivos del autoconocimiento
Al comprender y abrazar nuestras diferencias, podemos construir relaciones más sólidas y lograr los siguientes objetivos:
Conectar con tu propia esencia: En lugar de dejarnos llevar por la inercia de la mayoría, comprender que eres único con tus propios carismas.
Comprender el entorno que te rodea: Darte cuenta que no eres un individuo aislado e independiente.
Descubrir tus propias aspiraciones: Se trata de revelar lo que crees y lo que es importante como: motivaciones intrínsecas, talentos y posibilidades, tus valores, creencias y suposiciones ocultas en ello.
Descubrir tu propósito y misión: Como resultado, redefinir tu identidad como papel creativo en la vida, descubriendo un “Yo” nuevo pero original.
La capacidad de conocerse y comprenderse a sí mismo es un sentimiento mágico que llena su conciencia, lo empodera y lo ayuda a crecer como ser humano.
Es una buena idea conectar contigo mismo y aumentar la confianza. Esta es la cima de tu vida con el desarrollo personal.
La importancia de conocer ¿quién soy?
Inspirar, influir y motivar a otros, es una combinación de muchos factores que propician el desarrollo personal. La importancia de estar conscientes de nuestras propias fortalezas y debilidades aportan en:
- Crecimiento personal. Saber quién soy, puede ayudar a tomar mejores decisiones en función de quién soy, y no, de lo que otros piensen que es mejor para mí.
- Superar los miedos. La falta de conocerse, es la razón por la que no puedes actuar ante tus miedos. Aceptar tus miedos mientras intentas superarlos, requiere un cierto nivel de conocimiento.
- Tomar decisiones coherente. Saber ¿quién eres?, demuestra que estás al tanto de lo que quieres hacer para planificar de forma coherente, tu vida personal y profesional.
- Poder expresar libremente tus gustos y disgustos. Entender ¿qué te apasiona? y ¿cómo piensas sobre los problemas de la vida?, son algunas de las cosas en que el autoconocimiento puede ayudarte.
- Encontrar el trabajo que disfrutas y en el que eres bueno. Cuando se trata de encontrar o cambiar de trabajo, conocer lo que te motiva ayuda a detectar, el trabajo que encaja con tus fortalezas e intereses.
- Cultivar relaciones saludables. Conocer sobre ti puede ayudar a construir relaciones saludables. Reconocer tus emociones, preferencias y objetivos de vida, hará fácil ver las cualidades que te definen. Ayudará a tener relaciones más sanas.
- Mantener una actitud feliz y saludable. Desenvolverte ante la adversidad con claridad mental y equilibrio, ayudará a tu bienestar físico, mental y social.
- Aumentar la confianza. Estudios indican que, “las personas con un autoconocimiento de bajo a moderado, tienen más probabilidad a ser vulnerables y depresivos que las personas con un alto autoconocimiento”.
La capacidad de conocerse y comprenderse a sí mismo es un sentimiento mágico que llena tu conciencia, lo empodera y lo ayuda a crecer como ser humano.
Lo importante es encontrar la armonía del cuerpo y el alma para conocer el verdadero carisma que surge desde la principal fuente de inspiración, que es, nuestro yo interior; y encontrar, soluciones creativas a los problemas, con prácticas comunes para que surjan ideas frescas y limpias, durante nuestro proceso de autoconocimiento.
Prácticas sencillas para entenderme mejor
Las preguntas que nos hacemos muchos ¿Quién soy yo? y ¿Para qué estoy en este mundo?, nos lleva a trabajar “ya” en el autoconocimiento.
A muchos les parecerá difícil contestar estas preguntas pero sí, logras buscar ideas frescas y limpias a través de la inspiración, habrás iniciado bien con este proceso.
Y si crees que te encuentras estancado, no hay porque preocuparse, porque muchas veces no podemos exteriorizar lo que sentimos; lo importante es que sigas como lo estás haciendo, simplemente el que te propongas dar este primer paso, es un logro.
- Práctica la soledad.
Conectarnos con los demás y con nosotros mismos, en un nivel más profundo, pretende descubrir a dónde pertenecemos en el gran esquema de las cosas. Es posible practicar la soledad para responder preguntas, como:
¿Qué es peor para ti, fallar o no intentarlo?, ¿Cuál es la primera cosa que cambiarías en tu vida?, ¿Qué te hace sentir diferente a los demás?, ¿Cuál es tu mayor miedo?, ¿Cuál es tu recuerdo más preciado?, ¿Cuál es tu recuerdo más triste?, ¿Qué es lo que más te hace reír?, ¿Qué es lo que más agradeces de tu vida?.
Estas preguntas resultan valiosas como herramientas de autoconocimiento por lo que, es muy importante, que sean respondidas por ti y nadie más.
- Conoce tu verdadera fe
Puede sorprenderte cuánto surgirá de tus creencias y descubrirás si actúas de la misma forma como piensas.
Escribe lo que te venga a la mente relacionado a un tema. Después de un tiempo, dispondrás de algunas creencias que te describirán mejor.
Por ejemplo: Si el tema es entender las cualidades que más aprecias, pregúntate: ¿Qué cualidades aprecias más en un hombre?,¿Qué cualidades aprecias más en una mujer?
- Comprende la diferencia entre quién eres y quién quieres ser.
Al separarte de quién quieres ser, llegas a conocerte mejor. Comprenderte a ti mismo como una persona compleja, es poder explicar “quién eres” o “adónde vas”. Se trata de acercarte a tu mente subconsciente y consciente para ayudarte a mejorar.
Puedes realizar las siguientes preguntas: ¿Cuál dirías que es tu principal defecto?, ¿Qué es la felicidad para ti?, ¿Qué es lo que más te molesta hacer?, ¿Qué virtud te gustaría poseer?, ¿Qué es lo que más te gusta de tí? (físico o personal), ¿Qué es lo que menos te gusta de ti? (físico o personal).
- Reconoce tus logros
Es posible entenderte mejor si, te reconoces a ti mismo por tus logros y tu ardúo trabajo. La autoestima, la confianza y la motivación, se pueden atribuir al reconocimiento.
Si te reconoces es posible entenderte mejor. Pregúntate: ¿Si tuvieras un súper poder cuál sería?, ¿Cuándo te has sentido orgulloso de ti mismo?.
- Conoce tu pasión
Muchas personas apasionadas se sienten más realizadas y tienen un propósito en la vida. Puedes hacerte preguntas para llegar a conocer tu pasión como: ¿Cómo es un día perfecto para tí?,¿Cómo sería tu trabajo ideal?, ¿Qué consejo le darías a tu “yo” de hace 10 años?, ¿Qué cambiarias de este mundo si tuvieras la oportunidad?
Parte de nuestras vidas es no saberlo todo, lo importante es explorar y redescubrir quiénes somos. Si no tienes las respuestas a todas estas preguntas, puedes contestar poco a poco, darte tiempo y buscar esos momentos inspiradores para hallar la respuesta.
Es momento de conocer a la persona más importante en tu vida y esa… eres tú. ¿Nos conocemos realmente?.